Los alevines del Sevilla FC se han adjudicado con solvencia la vigente edición de la Liga de las Promesas, que se ha celebrado en Villarreal. Los nervionenses dominaron al FC Barcelona desde el pitido inicial en una intensa final que terminó por un inapelable 2-1. Los goles hispalenses corrieron a cargo de Carlitos, que anotó una diana muy tempranera, y el capitán Pancho; y el tanto azulgrana fue ejecutado, a seis minutos para el cierre, por Servat. A falta de dos minutos para el final, Carlitos estuvo muy cerca de ampliar distancias a través de un zapatazo de falta. Romero, el portero del Sevilla FC, que salió en la segunda parte, cuajó una gran actuación en la final. “Ha sido duro, pero lo hemos conseguido”, afirmó el visueño Mario García, técnico del equipo de Nervión, que saltó al campo a celebrar la victoria junto a sus pupilos.
Es la segunda vez que el alevín del Sevilla se corona en lo más alto de España tras el triunfo que ya consiguió hace nueve años. Como entonces lo ha hecho por la puerta grande tras una fase de grupos con números inmejorables y unas rondas finales en las que ha contado con un sello propio que lo ha hecho campeón. En Octavos eliminó al Real Madrid desde la tanda de penaltis tras acabar el choque empatado a uno. En Cuartos se deshizo del Celta, llamado conjunto revelación, por un 2-0. Y en las semifinales también desde los penaltis se impuso al Valencia. Una generación llena de jóvenes talentos que ha festejado por todo lo alto el título que los sitúa como el mejor conjunto alevín de toda España.
