Sin hacer un buen partido el CD Mairena sumó un buen punto ante un peligroso Ciudad de Lucena que espabiló tras el descanso pero que se encontró en todo momento a un oponente que, con sus aciertos y sus errores, ha aprendido a competir y eso ya es un punto a favor. Y gracias a esa autoexigencia el equipo de Ángel Gómez arañó un punto difícil porque tras el descanso el partido se complicó. El rival, lanzado hacia el primer puesto, desperdició claras ocasiones de gol, algunas precedidas de errores en defensa del conjunto mairenero. Debutó Jozabeth y cuajó un serio partido pese al tiempo que lleva sin competir.
La más clara fue un penalti que detuvo Bruno y que mantuvo con vida al Mairena. Un penalti que vino precedido de un libre indirecto que señaló el colegiado tras un barullo dentro del área sin que nadie supiese dónde estaba el balón. Poco después Erik dejaba al conjunto lucentino con uno menos sobre el campo, pero ni mucho menos se acabó el peligro. También el Mairena tuvo la suya, pero Muñoz, que hizo un trabajo descomunal, llegó sin fuerzas para definir como sabe un mano a mano. En los últimos minutos y ya con el partido alocado pudo pasar cualquier cosa, pero lo más justo fue el reparto de puntos. Con 16 se queda el Mairena, en la antepenúltima plaza y ahora visita al Lora de Dioni Arroyo.