Nunca dejará de sorprender el fútbol. Es lo que puede pensar Salvador Sánchez Bonilla, pese a su extensa trayectoria en los banquillos. El técnico visueño ha sido cesado como entrenador de la AD Carmona, aunque todavía nadie se lo ha hecho saber, después de que la plantilla así lo haya decidido en una votación secreta, con el beneplácito de una directiva que ha tirado por el camino fácil, el de echar a un entrenador antes que a varios jugadores, si bien presidente y entrenador tienen una reunión en la noche de este jueves.
A pesar de que el equipo carmonense venía de ganar en Triana, donde ningún otro equipo lo había conseguido en las últimas 27 semanas, por el Pepe Olías la calma era relativa porque la desavenencia entre el técnico y tres jugadores locales han derivado en un cese impensable a tenor de los resultados. En su lugar llega José Antonio Arias, quien se muestra “ilusionado” por formar parte de este proyecto.
Sánchez Bonilla ha dirigido a un Carmona no sin dificultades, de hecho ha estado al borde de la desaparición, pero el visueño ha conseguido aislar al equipo de los problemas económicos e institucionales, hasta el punto de conseguir, por la vía administrativa, el ascenso a la Segunda Andaluza. Y todo con un proyecto bajo coste y con jugadores de Carmona.