Más que hablar de lo que había sido el triunfo ante el CD Demo, en sala de prensa Ángel Domínguez tuvo que responder a preguntas relacionadas con el futuro. Y la primera pregunta obligada es saber si el técnico mairenero va a continuar el curso siguiente en el banquillo del San Bartolomé. En este sentido, dio a entender que no le desagrada la idea de seguir pero apuntilló que “nos tenemos que sentar a hablar con la directiva” y que de continuar sería con la condición de que “mi segundo también esté conmigo. Es una persona muy válida y una segunda opinión muy importante para mí”. El todavía entrenador del CD Mairena reconoce que en verano “se tomaron decisiones equivocadas” pero, al menos, “se ha sabido rectificar y se ha salvado la temporada”. Y recuerda, para “aprender” de esos posibles errores, que “los últimos proyectos con entrenadores de fuera, todos han fracasado”.
De lo que ha sido su trayecto en esta liga, “la mejora del equipo ha sido total. Cuando yo entré no había pocas cosas trabajadas. Tuvimos que cambiar nueve jugadores y hemos tenido que trabajarlo todo. Pero hemos competido siempre salvo el partido de El Coronil”. Aunque habrá que hacer la autocritica pertinente, Ángel Domínguez quiere también que se mire al futuro con optimismo. “Ahora a pensar en dar un paso hacia delante”, pero entiende que es necesario que “esa gente que nos quiere ver muerto empiece a apoyarnos. Hay mucha gente fuera deseando que fracasemos pero los pocos que estamos dentro, somos una familia” y presume de vestuario. “Un vestuario en el que no hay ni una mala persona, nos llevamos bien y eso es una maravilla para entrenar y competir”, finaliza.