A pesar de que una lesión lastró su inicio de campeonato y le impidió disputar la primera prueba y le hizo estar a medio gas en la segunda.
Varios días antes de comenzar el Mundial se fracturó la escápula. Estar dos meses y medio de recuperación es una losa demasiado pesada para cualquier piloto que opte por ganar el Campeonato del Mundo, pero el espíritu de superación de Sergio le ha llevado a realizar las tres siguientes pruebas a gran nivel, consiguiendo pódium en dos de ellas. Resultados que le han permitido erigirse en el quinto mejor piloto del mundo de esta disciplina.
Su hermano Alejandro se lesionó en la espalda tras una caída en la prueba celebrada en Santiago de Compostela. Suma 4 meses y medio al margen de la competición, pero sigue recuperándose con la vista centrada en volver a las dos ruedas cuanto antes.
Ambos hermanos forman parte de un equipo conformado por la Federación Española con cuatro jóvenes y prometedores pilotos, con vistas a promocionarlos ante otros equipos.
Su próximo objetivo el año próximo es el de «no lesionarse» para intentar luchar por el título. Sergio tendrá a su hermano Alejandro como uno de sus principales rivales.
