Ganó el CD Alcalá su primer partido del nuevo año tras el parón navideño. Lo ha hecho en casa y con algo de sufrimiento ante un Rinconada en descenso y que acabó el partido con nueve jugadores, pero la falta de acierto hizo que el equipo de Conejero no fuese capaz de cerrar un partido que por ocasiones debió ganar, como ha hecho, pero por goleada. Aunque lo importante es que los tres puntos se quedaron en el Ciudad de Alcalá.
El carrusel de ocasiones fue tan extenso como variado. Incluso Alan erró un penalti cuando el Alcalá ya ganaba en el partido y el rival se había quedado con dos jugadores menos. Su lanzamiento desde los once metros se fue al poste. No era el día de cara a portería ni del argentino ni del resto del equipo, lo que no es habitual.
Pero acabó sacando el partido adelante gracias a regalos del rival. Al poco de comenzar la segunda mitad, un error no forzado iba a costarle a Mario García. Y camino del minuto 70, tras continuar el conjunto alcalareño fallando ocasiones, otro error iba a poner en bandeja el gol de Murillo, que anotaba con frialdad a puerta vacía pese a la presión de un defensor y del portero.
Y aún había más porque en el minuto 74 David Cuevas veía la roja directa y el Rinconada se quedaba con nueve jugadores. Pero el Alcalá seguía sin tino y el equipo visitante acabó llegando con vida al partido, aunque las aproximaciones fueron únicamente a balón parado.
Primera victoria del nuevo año en la primera jornada de la segunda vuelta, que mantiene al Alcalá en la segunda plaza con 41 puntos, a cinco del líder y seis por encima de los perseguidores al cuarteto de cabeza. Siguiente parada, Morón.