Ha comenzado oficialmente la temporada 23-24 por la comarca con la disputa de la eliminatoria de cuartos de final de la Copa Provincial, competición en la que vuelve a estar el CD Mairena, finalista hace dos temporadas, gracias a su cuarto puesto en Primera Andaluza el curso anterior. Había ganas además de ver a este renovado Mairena en lo institucional pero también sobre el césped, para la ocasión más de tierra y de barro por las inclemencias meteorológicas.
El partido fue especialmente intenso y bronco, hasta el punto de que hubo cuatro expulsados (dos por cada equipo) y el árbitro decidió su suspensión durante algo más de veinte minutos cuando restaban no más de tres para su finalización tras el lanzamiento, al parecer, de una silla desde una de las gradas y que, afortunadamente, no impactó en nadie.
Cuando hizo acto de presencia tanto la Guardia Civil como la Policía Local se reanudó el choque, pero en esos tres minutos que restaban nada ocurrió, como era de esperar. Tampoco antes es que fuera el partido prolifero en ocasiones. Puso más de su parte eso sí el Mairena, pero su insistencia no tuvo premio porque no se acertó de cara a portería en las pocas acciones de peligro. Así pues, un 0-0 que lo deja todo en el aire. La vuelta, el próximo fin de semana en San Jerónimo.
