Su fichaje ha sido todo un acierto para un CD Mairena huérfano de jugadores con carisma, sin tener en cuenta los que son de la casa. Nació en Brasil y no tuvo una infancia nada fácil, pero siempre le acompañó una pelota y su afición y dedicación al fútbol le permitió dar el salto a España cuando aún no era ni mayor de edad. Y tras probar en equipos como Salamanca o Valladolid, Lucas llegó a Sevilla, donde sigue viviendo a pesar de haber hecho algunos paréntesis para, en unos casos, volver a Brasil, y, en otros, acudir a una aventura exótica por Lituania que no salió bien porque como suele ocurrir en estos casos, lo prometido no traspasa el papel.
Pero con su aterrizaje en el San Bartolomé, Lucas ha vuelto a sonreír y con él un Mairena que empieza a estar a su altura. El equipo de Ángel Domínguez recibe este domingo (12 horas) a la UD Tomares, y de ganar se instalaría en la parte privilegiada de la Primera Andaluza. De momento está a cuatro puntos del líder Pedrera, pero la gente vuelve a engancharse a un equipo que compite y que, además, cuenta con jugadores que despiertan admiración, caso de Lucas.
