Un gol de Andrés Castellano (hijo) en el tramo final del encuentro da otro triunfo como local a La Barrera ante un peligroso El Rubio.
Tampoco El Rubio aun habiendo sido el mejor equipo que ha pasado esta temporada por el Jozabed Sánchez ha podido acabar con la buena racha de La Barrera como local, que no sólo lo gana todo en casa, sino que además tampoco encaja.
Y eso que el conjunto visitante generó bastante peligro con gente como Chía, que se encontró con la madera en una de las ocasiones visitante en el primer acto, y Nelson, que se movió bien arriba y se presentó de gol alguna que otra vez.
Pero La Barrera, que estrenaba equipación en partido oficial, no es que fuera inferior a su rival, ya que Gómez movió al equipo a su antojo pero arriba faltó ese rematador que culminara las jugadas. No fue así ni con Samu ni con Jonay, que tuvo en el segundo acto una bastante clara antes de que Andrés Castellano, el hijo del míster alcalareño (que fue expulsado en el primer período), acertara con su lanzamiento desde dentro del área tras una buena jugada combinada en banda derecha.
Por delante en el marcador, La Barrera supo jugar y conservar esa ventaja, consiguiendo una valiosa victoria tanto por el rival que había enfrente como por la dinámica en la que se había entrado por esas dos derrotas consecutiva fuera de casa. Un hándicap como visitante que se quiere cortar en la siguiente salida, que será a Piscinas Sevilla para jugar ante la AD Nervión. La zona de ascenso sigue quedando a cinco puntos.