El Mairena pierde en casa ante el CD Diablos Rojos, un rival de la zona baja, en un partido marcado por el fuerte viento.
Entre el viento y lo que no es el viento, el Mairena acabó perdiendo en casa ante el CD Diablos Rojos. Un rival de la zona baja que supo jugar mejor sus bazas, aprovechándose de que la ventolera, que sopló con demasiada fuerza, estaba de cara en la primera mitad y que, en la reanudación, cuando daba la espalda, el Mairena no aprovechó esa corriente a favor.
Empezó el encuentro con un dominio territorial de los de Ángel Domínguez, pero sin ocasiones claras de gol. No fue el encuentro prolifero en ocasiones. Pero la única que tuvo el bando rojillo en el primer acto acabó dentro. Anotó Vázquez, al filo del descanso. El partido se ponía cuesta arriba y tras la reanudación, apenas dio tiempo a hilvanar un ataque cuando el bloque torrealbense hacía un segundo tanto, que llevó la firma de Israel, quien se aprovechó de un balón suelto dentro del área que no supo despejar la defensa albinegra.
Se siguió intentado pero entonces el viento, más que ayudar, perjudicó. Cualquier balón en largo acababa fuera del terreno de juego y si no había precisión en los pases, el cuero se acaba perdiendo. Y en los balones frontales, la defensa rival anduvo cómoda. En resumen, derrota que asienta al Mairena en esa zona de nadie en la tabla. Ahora toca jugar entre semana en Bellavista y el domingo, en Villaverde.